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lunes, junio 25, 2007

MENDIGO



Una vez superado el trance que me supuso la lectura de Hard Story pensaba que sería difícil que Jorge González superase el expresivísimo grafismo alcanzado de rameras dulcemente musicales y chulos atormentados de flequillo melancólico. Sin embargo, hasta que no leí Mendigo, no me replanteé hasta donde puede llegar este chico. De acuerdo, los guiones de Horacio Altuna (Hard Story) y de Carlos Jorge tienen mucho que decir pero pocas veces he visto a un dibujante implicarse tanto en la historia hasta hacerla suya y dotarla de una coherencia muy personal.
Pero volvamos a Mendigo. Para empezar, el drama propuesto por Carlos Jorge, con regustos de novela negra, resulta bastante interesante en su planteamiento. Julius, un mendigo que aguarda la muerte de un hombre llamado Víctor a través de la lectura metódica de las esquelas del periódico es el protagonista de una venganza que no pudo llevar a cabo y que ahora, tras más de veinte años de vagabundeo, tiene una nueva oportunidad para ejecutarla. No desvelaré los motivos de la larga obsesión de Julius por ver muerto a Víctor pero si que el hijo y la mujer de este se verán profundamente implicados. El resultado es, dados los acontecimientos, una venganza distinta a la que había planeado, siendo esta más cruel que la propia muerte. La verdad.
Y Jorge González toma esta historia, imprimiéndole su particular estilo al que añade la novedad de un colorido muy a lo Mattoti y su El rumor de la escarcha. Unos colores mutables según el lugar y la situación en la que se encuentran, dotándole a la narración de un expresionismo muy sugerente. También Jorge González se atreve con unos planos muy dinámicos dentro de su quietud con inclinaciones cadenciosas, contrapicados expectantes y primeros planos palpitantes en lo más hondo de la amargura interna de Julius.
En cuanto a la narración, esta sigue un ritmo muy musical, casi melódico siendo esta, a mi entender, lo que le hace tan especial y del que ya diera excelentes muestras en Hard Story. Una narración que te va meciendo a través de compases metrónomicos.
Jorge González lo ha vuelto a hacer.
Publicado en 2004 por Ediciones Glénat, dentro de la Delicatessen Colección, es un álbum para aquellos que buscan la vibración visual acompañada de un buen guión.

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